Que es taker arte urbano

Que es taker arte urbano

El taker arte urbano es un fenómeno cultural que se ha desarrollado alrededor del arte callejero, específicamente relacionado con la figura del taker, un término que se usa en el contexto del graffiti para describir a aquellos que toman imágenes, letras o piezas de otros artistas para utilizarlas en sus propios trabajos. Este concepto está profundamente arraigado en el submundo del arte urbano, donde la originalidad y la identidad visual son claves. En este artículo exploraremos en profundidad qué significa ser un taker, su papel en la comunidad del graffiti, y cómo este fenómeno influye en la evolución del arte urbano.

¿Qué es un taker en el arte urbano?

Un taker, en el contexto del graffiti y el arte urbano, es una persona que toma elementos visuales—como letras, logotipos, piezas o incluso imágenes—de otros artistas y los incorpora en sus propias obras. Este acto no siempre implica plagio, ya que en la cultura del graffiti existe cierta tradición de samplear o tomar prestado elementos de otros artistas para crear algo nuevo. Sin embargo, cuando este proceso se hace de manera repetida sin aportar valor o sin reconocer la influencia original, puede ser visto como una práctica cuestionable o incluso plagio estilístico.

Este concepto está muy presente en las comunidades de graffiti, donde el reconocimiento del autor es fundamental. En muchos casos, los takers son considerados artistas que no tienen una identidad visual propia y se basan en la imitación de otros. Aunque esto puede ser visto como una forma de aprendizaje o inspiración, cuando se exagera, puede llevar a una pérdida de creatividad y originalidad en la escena.

Un dato interesante es que el término taker también puede aplicarse en otros contextos artísticos, como el arte digital o incluso en la música, donde se habla de samplear o tomar prestado. En el graffiti, sin embargo, adquiere una connotación muy específica y a menudo negativa.

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El impacto de los takers en la cultura del graffiti

La presencia de los takers en la cultura del graffiti no es una novedad. Desde los inicios del graffiti en los años 70 en Nueva York, muchos artistas jóvenes comenzaron a imitar a los más reconocidos, como Taki 183 o Lady Pink, para ganar visibilidad. Aunque esto puede ser visto como una forma de aprendizaje, en muchos casos también se convierte en una forma de copiar y pegar estilístico sin aportar una visión única.

Este fenómeno no solo afecta a los artistas individuales, sino también a la identidad visual de las crews (grupos de graffiti). Cuando un grupo se llena de takers, pierde su cohesión estilística y su capacidad de innovar. Esto puede llevar a una saturación del estilo en las paredes, donde se repiten las mismas formas, letras y piezas sin evolución.

Además, en la escena del graffiti, existen ciertas normas no escritas sobre el respeto entre artistas. Mientras que algunos artistas aceptan que otros tomen pequeños elementos de su trabajo como inspiración, otros se sienten ofendidos cuando sus piezas son utilizadas sin crédito ni modificación. Esta dinámica puede generar tensiones dentro de la comunidad y afectar la reputación de los takers.

El rol de los copys en la evolución del graffiti

En el graffiti, el término copy se usa con frecuencia para describir a aquellos que copian directamente el estilo de otro artista sin aportar su propia identidad. A diferencia de los takers, que toman elementos y los adaptan, los copys son considerados plagios completos. Esta práctica es muy criticada dentro de la comunidad, especialmente cuando se trata de artistas que han trabajado durante años para desarrollar un estilo único.

En este contexto, el arte urbano se ve afectado negativamente cuando gran parte de las obras visibles en las calles son imitaciones de estilos ya establecidos. Esto no solo limita la diversidad visual, sino que también reduce la posibilidad de que emergan nuevas voces creativas. Por otro lado, algunos argumentan que la imitación es una parte natural del aprendizaje artístico, y que el graffiti, como cualquier forma de arte, evoluciona a través de la interacción entre artistas.

Ejemplos de takers en el graffiti

Existen varios ejemplos históricos de artistas que han sido considerados takers en la escena del graffiti. Uno de los casos más conocidos es el de Phase 2, un artista que, en sus inicios, fue acusado de copiar estilos de otros artistas antes de desarrollar su propio estilo único. Otro ejemplo es Temper 2X, quien, aunque llegó a tener un estilo reconocible, fue inicialmente señalado como taker por su uso de piezas y letras similares a las de otros artistas.

Estos ejemplos muestran que ser un taker no siempre implica una carrera artística fracasada. De hecho, muchos artistas reconocidos comenzaron como takers, usando como base el trabajo de otros para luego desarrollar su propia identidad. Sin embargo, lo que diferencia a un taker de un copy es el grado de adaptación y originalidad que aporta al trabajo final.

Un buen ejemplo de evolución positiva es Cope2, un artista que fue inicialmente visto como un taker por su uso de piezas de otros artistas, pero que con el tiempo desarrolló su propio estilo único. Su trayectoria muestra que el proceso de tomar prestado puede ser una fase importante en el desarrollo artístico, siempre que se acompañe de una evolución personal y creativa.

El concepto de la influencia en el arte urbano

En el graffiti, el concepto de influencia juega un papel fundamental. Casi todos los artistas reconocidos tienen influencias que pueden identificarse en su trabajo. La diferencia entre una influencia legítima y un taker radica en el equilibrio entre la inspiración y la originalidad. Un artista que toma elementos de otros pero los transforma, los adapta y les da un nuevo sentido, puede ser considerado como influenciado, no como un taker.

Este proceso de influencia es común en todas las formas de arte, desde la música hasta la pintura. En el graffiti, sin embargo, el debate sobre qué constituye una influencia legítima y qué es un plagio estilístico es especialmente intenso. Algunos artistas defienden la idea de que el graffiti es una cultura de tomar y transformar, mientras que otros insisten en la importancia de la originalidad y la identidad personal.

Para entender mejor este concepto, podemos analizar cómo los artistas utilizan samples o tags de otros artistas en sus obras. Si el uso de estos elementos es creativo y no se limita a una copia directa, puede ser visto como una forma de diálogo artístico. Sin embargo, cuando se trata de una repetición mecánica sin aportar valor, se cae en la categoría de taker.

Una recopilación de artistas que evolucionaron de takers a creadores únicos

Muchos artistas reconocidos del graffiti comenzaron como takers, pero con el tiempo desarrollaron su propio estilo. Aquí tienes una lista de algunos de ellos:

  • Phase 2 – Inicialmente fue acusado de copiar estilos, pero con el tiempo desarrolló su propio estilo único de letras y piezas.
  • Temper 2X – Aunque fue señalado como taker en sus inicios, logró evolucionar y crear un estilo muy personal.
  • Cope2 – Comenzó con un estilo muy similar a otros artistas, pero terminó desarrollando una identidad visual propia.
  • Tats Cru – Este colectivo incluye a artistas como San1t y Futura, quienes también pasaron por fases de takers antes de convertirse en referentes del graffiti global.
  • Blade – Aunque es conocido por su estilo único, también fue influenciado por otros artistas en sus primeros años.

Estos ejemplos muestran que el proceso de evolución artística es común en la escena del graffiti. Aunque ser un taker puede ser visto como una fase de aprendizaje, lo que realmente define a un artista es su capacidad para transformar la influencia en algo original.

El debate entre originalidad y evolución en el graffiti

El graffiti es una forma de arte que se nutre constantemente de la evolución de los estilos y las técnicas. Sin embargo, este proceso de evolución no siempre es visto como positivo. En la comunidad del graffiti, existe un debate constante sobre el equilibrio entre la originalidad y la evolución. Por un lado, se valora la capacidad de los artistas para crear algo nuevo; por otro, se reconoce que el arte se desarrolla a través de la interacción y la influencia mutua.

En este contexto, el término taker puede ser interpretado de diferentes maneras. Para algunos, es una crítica a la falta de creatividad; para otros, es una parte natural del proceso de aprendizaje. Lo que está claro es que el graffiti no se desarrollaría sin la interacción entre artistas. Cada estilo, cada letra, cada pieza es el resultado de una historia de influencias y evolución.

Este debate también se extiende a la percepción del público. Mientras que algunos ven al graffiti como un arte de rebeldía y originalidad, otros lo perciben como una cultura que se basa en la repetición y el plagio. Esta visión opuesta refleja la complejidad del arte urbano, donde la originalidad y la repetición coexisten de formas contradictorias.

¿Para qué sirve el taker arte urbano?

Aunque el término taker puede tener connotaciones negativas, su presencia en el graffiti no es innecesaria. De hecho, en ciertos contextos, los takers pueden desempeñar un papel importante en la evolución del estilo y la popularización de ciertos elementos. Por ejemplo, cuando un estilo se vuelve popular, es común que muchos artistas lo imiten, lo que ayuda a su difusión y a su consolidación como parte de la cultura urbana.

Además, el hecho de que los takers tomen elementos de otros artistas puede llevar a nuevas combinaciones y fusiones de estilos, lo que en última instancia puede contribuir a la innovación. En este sentido, el taker arte urbano puede ser visto como una forma de samplear visual, similar a cómo se hace en la música electrónica o el hip-hop.

Sin embargo, es importante destacar que el taker arte urbano solo es aceptable cuando se convierte en algo más que una mera imitación. Cuando los artistas toman elementos y los transforman, adaptándolos a su visión personal, pueden contribuir a la evolución del estilo de una manera positiva.

Sinónimos y variaciones del concepto de taker

En el graffiti, existen varios términos que pueden usarse como sinónimos o variaciones del concepto de taker. Algunos de los más comunes incluyen:

  • Copy: Se refiere a un artista que copia directamente el estilo de otro sin aportar su propia identidad.
  • Sample: En este contexto, se refiere a la toma de un elemento visual—como una letra o una pieza—y su adaptación en otra obra.
  • Influencia: Un término más neutro que describe cómo un artista toma ideas de otro como base para desarrollar su propio estilo.
  • Plagio estilístico: Un término más fuerte que describe una imitación directa sin aportar valor o originalidad.

Cada uno de estos términos se usa en diferentes contextos y con diferentes matices. Mientras que copy y plagio estilístico tienen connotaciones negativas, sample y influencia son términos más neutros o incluso positivos, dependiendo del contexto en que se usen.

La evolución del taker arte urbano en la era digital

Con el auge de las redes sociales y las plataformas digitales, el taker arte urbano ha adquirido una nueva dimensión. Hoy en día, es más fácil que nunca para los artistas compartir su trabajo, pero también para que otros tomen elementos de sus obras y los reutilicen. Esto ha llevado a un aumento en la cantidad de takers en línea, donde se pueden encontrar artistas que copian estilos, colores y formas sin crédito ni adaptación.

En este contexto, el debate sobre originalidad y plagio se ha intensificado. Muchos artistas digitales y físicos expresan preocupación por la facilidad con que sus trabajos son reutilizados sin autorización. Sin embargo, también hay quienes ven esta dinámica como una forma de expansión del arte urbano a nuevos públicos y espacios.

La tecnología también ha permitido que los takers trabajen de manera más eficiente, usando herramientas digitales para copiar y reutilizar elementos con mayor facilidad. Esto ha llevado a una discusión sobre si el arte urbano digital sigue las mismas normas que el graffiti tradicional o si necesita adaptarse a nuevas realidades.

El significado del taker arte urbano

El taker arte urbano representa una faceta compleja de la cultura del graffiti. En su esencia, describe un fenómeno donde los artistas toman elementos visuales de otros para incorporarlos en sus propias obras. Este proceso puede ser visto desde múltiples perspectivas: como una forma de aprendizaje, como una estrategia de evolución estilística, o como una crítica a la falta de originalidad en ciertos artistas.

Desde un punto de vista histórico, el taker arte urbano ha estado presente desde los inicios del graffiti, cuando los artistas jóvenes buscaban inspiración en los más reconocidos. En ese contexto, el proceso de tomar prestado era una forma de integrarse en la cultura del graffiti y aprender las técnicas básicas. Sin embargo, con el tiempo, este fenómeno ha adquirido una connotación más crítica, especialmente cuando se trata de artistas que no evolucionan más allá de la imitación.

En la actualidad, el taker arte urbano también se ha visto afectado por el auge de las redes sociales, donde la presión por la originalidad y la visibilidad ha llevado a una mayor crítica hacia los artistas que no aportan una identidad visual única.

¿Cuál es el origen del término taker?

El término taker se originó en la cultura del graffiti a mediados de los años 80, durante la expansión del arte callejero en Estados Unidos. En esa época, los artistas comenzaron a identificar a aquellos que copiaban estilos sin aportar una visión personal. Aunque no existe un registro escrito que documente exactamente quién acuñó el término, se cree que surgió como una forma de describir a los artistas que tomaban elementos de otros sin reconocer su influencia.

Este término se popularizó especialmente en el Reino Unido, donde el graffiti se desarrolló de manera independiente y con su propia identidad. En Londres, el debate sobre originalidad y plagio fue más intenso, lo que llevó a que el término taker se usara con mayor frecuencia en las discusiones dentro de las crews.

Hoy en día, el taker es un concepto que trasciende el graffiti y se ha aplicado en otros contextos artísticos, como el arte digital, la música y hasta el diseño gráfico. En todos estos casos, el término se usa para describir a aquellos que toman elementos de otros sin aportar algo nuevo.

Variantes y sinónimos del taker arte urbano

Aunque el término taker es el más común, existen otras formas de referirse a este fenómeno en el graffiti. Algunos de los sinónimos o variantes incluyen:

  • Copycat – Se usa para describir a alguien que imita directamente a otro artista.
  • Sampleo visual – Se refiere a la toma de elementos visuales para crear algo nuevo.
  • Influencia estilística – Un término más neutro que describe cómo un artista toma ideas de otro como base para su estilo.
  • Plagio artístico – Un término más fuerte que describe una imitación directa sin aportar valor.

Cada uno de estos términos tiene un uso específico y una connotación diferente. Mientras que copycat y plagio artístico tienen una carga negativa, sampleo visual y influencia estilística son términos más neutros o incluso positivos, dependiendo del contexto en que se usen.

¿Cómo identificar un taker en el arte urbano?

Identificar un taker en el arte urbano no siempre es tarea fácil, ya que la influencia estilística es común en la evolución del graffiti. Sin embargo, hay ciertos signos que pueden ayudar a distinguir entre un artista que toma inspiración legítima y uno que cae en la categoría de taker:

  • Repetición constante de elementos: Si un artista repite constantemente las mismas letras, piezas o formas que son típicas de otro artista, puede ser señal de que es un taker.
  • Falta de evolución estilística: Un taker a menudo no muestra evolución en su trabajo, lo que sugiere que no está desarrollando su propio estilo.
  • Uso directo sin adaptación: Si un artista toma una pieza o una letra de otro sin modificarla o adaptarla, es más probable que sea un taker.
  • Ausencia de identidad visual única: Un taker suele carecer de una firma o estilo que lo diferencie del resto de la escena.

Aunque estos signos pueden ayudar a identificar a un taker, es importante tener en cuenta que no todos los artistas que toman elementos de otros son necesariamente takers. Muchos artistas evolucionan a partir de la influencia de otros, y eso no siempre implica una falta de originalidad.

Cómo usar el concepto de taker arte urbano

El concepto de taker arte urbano puede ser utilizado de varias maneras, tanto como herramienta de análisis como como crítica constructiva. Por ejemplo, cuando se analiza una obra de graffiti, es útil identificar si el artista ha tomado elementos de otros sin aportar algo nuevo. Esto puede ayudar a entender el proceso creativo detrás de la obra y a evaluar su originalidad.

También puede usarse como una forma de reflexionar sobre la importancia de la identidad visual en el arte urbano. Si un artista se percibe como un taker, puede ser una señal de que necesita encontrar su propio estilo o que está en una fase de aprendizaje. En este sentido, el término taker puede ser una herramienta de autoevaluación para los artistas que buscan desarrollar su propia identidad.

Otra forma de usar el concepto es en el ámbito educativo, donde se puede enseñar a los artistas jóvenes sobre la importancia de la originalidad y la evolución estilística. Esto ayuda a evitar que caigan en la trampa de convertirse en takers y les permite desarrollar un estilo único.

El impacto social del taker arte urbano

El taker arte urbano tiene un impacto social que va más allá del ámbito artístico. En comunidades donde el graffiti es una expresión cultural importante, la presencia de takers puede generar conflictos entre artistas. Esto puede llevar a una competencia desleal o a una saturación de estilos similares en las paredes, lo que afecta la diversidad visual de la escena.

Además, el fenómeno de los takers puede influir en la percepción pública del graffiti. Cuando se ven obras repetitivas o sin originalidad, el arte urbano puede ser visto como una actividad superficial o sin valor artístico. Esto puede llevar a una mayor hostilidad hacia el graffiti por parte de las autoridades y la sociedad en general.

Por otro lado, también hay quienes argumentan que el taker arte urbano es una forma de democratización del arte. Al permitir que más personas participen en la escena, incluso si no tienen un estilo único, se abre la puerta a una mayor diversidad de expresiones. Sin embargo, esto también puede llevar a una dilución de la calidad artística.

El futuro del taker arte urbano

Con el avance de la tecnología y la globalización del arte urbano, el taker arte urbano está evolucionando de maneras que no se habían imaginado antes. En el futuro, es probable que se desarrollen nuevas formas de identificar la influencia y la originalidad, ya sea a través de algoritmos de análisis visual o mediante plataformas digitales que permitan a los artistas reconocerse mutuamente.

También es posible que el debate sobre originalidad y plagio se aborde de manera más abierta y constructiva. En lugar de ver al taker como algo negativo, podría verse como una fase necesaria en el desarrollo artístico. Esto permitiría a los artistas aprender, evolucionar y encontrar su propia voz sin sentirse presionados por la necesidad de ser únicos desde el principio.

En cualquier caso, el taker arte urbano seguirá siendo un tema relevante en la cultura del graffiti. Su impacto en la escena artística y social será determinado por cómo los artistas, las comunidades y la sociedad en general eligen abordarlo.